Ethereum, ¿Qué es y cómo funciona?

El rasgo principal de Ethereum está desafiando y revolucionando todo lo que conocíamos hasta ahora, gracias a que su vanguardista propuesta permite la creación y el desarrollo de nuevas aplicaciones y nuevas criptomonedas de forma mucho más rápida que otras plataformas.

Si bien es cierto que la gran mayoría de programadores y amantes de la esfera cripto ya lo saben todo acerca de Ethereum, existen también muchas personas que buscan adentrarse en este mundo y no saben cómo hacerlo. Si tú eres una de esas personas, en esta guía encontrarás todas las respuestas a tus interrogantes sobre esta divisa digital con tanto potencial. 

¿Qué es Ethereum?

El primer paso para entender qué es Ethereum, cuál es su función y el modo en que está cambiando las reglas del juego es conocer sus principales características y saber por qué se la considera la competencia de otras plataformas similares.

En primer lugar, Ethereum no se encuentra bajo la autoridad de ninguna entidad gubernamental, es decir, es un sistema descentralizado. Este tipo de sistema se diferencia en gran medida de un enfoque centralizado, ya que este último es controlado por una entidad única con el fin de evitar toda posible desconfianza entre las partes. Además, estos sistemas centralizados fallan en un único aspecto, lo que los convierte en un blanco fácil para los hackers y es también más propenso a sufrir cortes de energía. 

Por otra parte, la gran mayoría de sistemas centralizados como lo son las redes sociales y demás servicios en línea exigen como requisito que el usuario proporcione ciertos datos personales con el fin de validar su identidad y almacenarla en sus servidores. De este modo, los piratas informáticos o incluso la misma compañía aprovechan esta oportunidad para introducirse en su sistema de datos y adueñarse de la información sin mayores dificultades. 

Es esta la razón por la que una de las propiedades inherentes de Ethereum sobre la que se ha hecho más hincapié es la necesidad de mantenerse como un sistema descentralizado, independiente y libre del control de cualquier entidad. Al no tener un punto único de fallo, dado que opera de forma simultánea desde miles de equipos informáticos a nivel mundial, nunca puede ser desconectado en su totalidad. En lo que a los datos personales de los usuarios se refiere, estos permanecen en sus ordenadores y nunca serán de dominio público.

El segundo paso es entender que Ethereum y Bitcoin son completamente diferentes, por más que a diario sean comparados entre sí. En efecto, se trata de dos proyectos discrepantes en un sinfín de aspectos, entre los que destacan sus principales objetivos.

¿En qué se diferencia Ethereum de Bitcoin?

Bitcoin nació en el año 2009 como la primera moneda virtual del mundo que no necesitaría de ninguna entidad financiera que la controlara, es decir, que sería totalmente descentralizada a nivel mundial. Esta criptomoneda ofrecía a su vez seguridad en todas y cada una de sus transacciones, y las validaba mediante la tecnología “Blockchain”.

Por su parte Blockchain, también conocida en español como “cadena de bloques”, consiste en un libro digital de contabillidad en el que se almacena y verifica los registros (bloques) producidos en el sistema. Su principal objetivo es validar las transacciones en las que Bitcoin participa a través de una red global de nodos que se encuentran en comunicación para mantener la cadena de bloques y hacer que esta sea incorruptible. Cada vez que se suman nuevos bloques o registros en la red estos se validan continuamente.

Por su parte, Ethereum opera también como una red Blockchain pública y distribuida, si bien presenta diferencias sustanciales conrespecto a Bitcoin, a pesar de que ambas pueden ser intercambiadas y minadas por sus usuarios. 

Bitcoin, por ejemplo, utiliza Blockchain para rastrear la titularidad de la moneda digital, lo que lo convierte un sistema digital de efectivo entre dos puntos sumamente eficaz. Por su parte, Ethereum tiene como objetivo la ejecución del código de programación de una determinada aplicación. 

El suministro máximo de Bitcoin se sitúa en 21 millones, límite que en algún momento será alcanzado, mientras que el suministro de Ether podría ser prácticamente infinito. Así mismo y en lo que a minería respecta, los bloques de Bitcoin tardan aproximadamente 10 minutos en ser minados, mientras que Ethereum se ha marcado como objetivo máximo 12 segundos, lo que significa que el tiempo de validación de Ethereum será mucho mayor y veloz que el de Bitcoin.

Dicho esto, Ethereum siguió los pasos de la tecnología previamente utilizada por Bitcoin y mejoró considerablemente sus capacidades. Se trata de una red que dispone de su propio navegador de Internet, sistema de pago y lenguaje de programación, lo que permite al usuario crear aplicaciones descentralizadas en la Blockchain de Ethereum. 

Dichas aplicaciones pueden ser actualizaciones descentralizadas de conceptos previamente existentes o bien ideas completamente innovadoras. En esencia, esto elimina la necesidad de intermediarios y por tanto los gastos que la mediación de terceras partes conlleva. Un ejemplo claro se encuentra en los “likes” y “compartir” de las publicaciones realizadas por tus artistas favoritos en Facebook, cuyo único beneficio procede de los anuncios colocados en tus páginas personales y que redirigen directamente a Facebook. Si Ethereum funcionara como la mencionada red social, ambas partes (artistas y público) obtendrían una ganancia por la comunicación y apoyo mutuos. Lo mismo sucedería con una versión descentralizada de Kickstarter, donde recibirías parte de las ganancias futuras de la compañía derivadas de tu colaboración, y no ya solo un mero dispositivo por tu participación. Ethereum acaba con los pagos a terceras partes por la realización de cualquier tipo de servicio. 

En definitiva, Ethereum se consolida como una plataforma basada en Blockchain, que cuenta con un sistema público, distribuido y de código abierto con el fin de permitir que los desarrolladores creen y lleven a cabo sus propias aplicaciones descentralizadas. 

Tal y como mencionamos anteriormente, Ethereum es un sistema descentralizado en el que los usuarios que lo conforman se comunican directamente unos con otros, sin necesidad de un intermediario o entidad reguladora. A esto se le denomina en inglés “peer-to-peer”. 

El sistema global de nodos se utiliza para respaldar la totalidad del sistema Ethereum. Estos últimos son voluntarios que se encargan de descargar la cadena de bloques completa de Ethereum en sus equipos informáticos y hacen que se cumplan todas las reglas de consenso del sistema, de forma que se evita cualquier posible estafa y se obtienen a cambio recompensas.

¿Qué es un contrato inteligente?

Los Contratos inteligentes, conocidos en inglés como “Smart Contracts”, son aquellos en los que se plasman todas las reglas de consenso y demás aspectos de la red. Su función no es otra que la de validar dicho contrato de forma automática una vez se alcance un acuerdo entre las dos partes implicadas, así como la realización de otras acciones cuando una de las partes no sea de absoluta confianza.

En el contrato quedan a su vez preprogramados los términos con los que las dos partes involucradas deben cumplir. De este modo, una vez ambas partes cumplan con lo acordado, el contrato se ejecutará del mismo modo en que fue programado, sin posibilidad alguna de que terceras partes interfieran en su aplicación ni de que se dé censura, fraude o tiempos de interrupción. 

Los contratos inteligentes proporcionan mayor seguridad, menores costes por operaciones relacionadas con la contratación y mayor confianza entre las dos partes con respecto a la ley contractual tradicional. Incluso se cree que dichos contratos llegarán a reemplazar a los contratos tradicionales en un futuro no muy lejano.

La máquina virtual de Ethereum (EVM)

Se considera que la principal innovación de Ethereum es la Máquina virtual de Ethereum (EVM por sus siglas en inglés). Se trata de un software completo de Turing con el que se puede resolver casi cualquier problema computacional y que es ejecutado dentro de la misma red de Ethereum. Fue diseñada principalmente con el objetivo de poner en marcha códigos algorítmicos complejos y facilitar el proceso de creación de aplicaciones a través de lenguajes de programación mucho más accesibles, como es el caso de JavaScript, evitando la construcción de una cadena de bloques completamente nueva para cada una de las aplicaciones. Ethereum permite que cada una de las aplicaciones sea desarrollada dentro de una misma plataforma. 

A su vez, la Máquina virtual de Ethereum se encuentra separada del resto de la red principal, lo que permite que cualquier empresa pueda utilizar la EVM a modo de “entorno de aprendizaje” con el fin de crear un contrato inteligente de mayores proporciones y más robusto, sin necesidad de que otras transacciones que tengan lugar en la cadena de bloques se vean afectadas. 

¿Es Ethereum una criptomoneda?

El sistema de Ethereum tiene como objetivo actuar de la misma forma que lo hace Internet, a la vez que sirve como tienda de aplicaciones descentralizadas. Para ello, es necesario invertir en recursos computacionales que ejecuten dichas aplicaciones o programas. Es aquí donde entra en juego “Ether” o “Ethereum Coin”. 

Entre las principales ventajas de Ether encontramos que no requiere de la participación de terceros para el procesamiento de pagos y que, lejos de funcionar únicamente como moneda digital, sirve de combustible para las aplicaciones descentralizadas que se ejecutan dentro de la red. El único aspecto que se debe tomar en consideración es que los usuarios deberán hacer frente al pago de una tasa por transacción si desean realizar cualquier modificación en una aplicación dentro de Ethereum.

Dichas tasas se calculan automáticamente en función de la cantidad de “combustible” que sea necesario para ejecutar la acción, incluyendo la potencia informática y el tiempo que tardará en ejecutarse.