Fri, 13/01/2023 - 16:48
Cualquier inversor sabe hasta qué punto fue desastroso el 2022 para los mercados bursátiles. Así, los valores individuales se desplomaron hasta en un 90 %, e incluso los grandes índices como el S&P 500 y el Nasdaq se han devaluado en torno a un 19 % y 31 %, respectivamente. Las acciones del Gigante Asiático se vieron igualmente golpeadas en 2022 hasta el punto de que, arrastradas por las continuas interrupciones en las cadenas de suministro, la política "cero COVID" adoptada por el Partido Comunista Chino (CCP) y la mano dura ejercida por Pekín contra las grandes firmas tecnológicas, los valores del Gigante Asiático parecían hallarse en una espiral descendente sin salida. Hasta de que dejó de ser así.
Teniendo en cuenta la ingente cantidad de noticias negativas que han generado los mercados occidentales en los últimos meses, no sería de extrañar que no hubieses percibido la lenta pero continua recuperación que se ha producido en China en los últimos meses. Todo comenzó a principios de noviembre y, desde entonces, algunas de las mayores tecnológicas del país han registrado ganancias de más del 30 %, lo que es un claro indicio de que se está formando una tendencia alcista. ¿Significa esto que traders e inversores deberían trasladar su capital a Hong Kong y Shanghái, o podría ser este movimiento alcista únicamente un presagio de una recuperación global?
Los aguafiestas
Los gigantes tecnológicos chinos ocuparon todos los titulares de la prensa por los peores motivos posibles a lo largo de 2021 y 2022, a medida que las prohibiciones al comercio impuestas sobre los títulos físicos estadounidenses American Depositary Receipts (ADR) y la mano dura adoptada por el partido comunista en poder para la regulación nacional provocaban un éxodo en masa de inversores de firmas nacionales como Tencent, Baidu, Netease y, por supuesto, Ali Baba. Esta última fue probablemente la empresa que en mayor medida acusó el golpe, a raíz de los reiterados pasos en falso dados por su fundador Jack Ma tras la decisión del regulador chino de detener la tan aclamada IPO del Ant Group en la bolsa Hang Seng de Hong Kong.
Pero este no fue más que un ejemplo de renombre de un claro cambio de referente dentro del país. A un nivel más amplio, el Partido Comunista de China decidió en última instancia que ya era hora de gobernar sobre sus propios Gigantes Tecnológicos a fin de evitar que estos llegasen a convertirse en su propio ente regulador. El resultado final fue una pronunciada depresión del precio de las acciones hasta mínimos aún inferiores para la mayoría de las tecnológicas del Gigante Asiático. Para cuando todo acabó, Tencent, Baidu y Alibaba habían perdido en torno al 70 %, 60 % y un escalofricante 80 %, respectivamente. Mientras tanto, la errada política "cero COVID" del partido no llevó sino miseria a los negocios chinos en su totalidad, dado que cada nuevo confinamiento asfixiaba aún más al comercio en todas sus formas.
Cuidado con el caballo negro
El riesgo de recesión en Europa y Estados Unidos acaparó todas las miradas, de forma que analistas y participantes en el mercado pasaron enteramente por alto el fondo registrado por los Gigantes Tecnológicos chinos. No obstante, el precio de las acciones de Tencent, Netease, Baidu y Ali Baba viene aumentando ligeramente desde noviembre de 2022, pasando prácticamente desapercibidos por los agentes occidentales. Estas acciones han experimentado una revalorización promedio del 70 % en los últimos tres meses, y parece que la tendencia ascendente se mantendrá. Si consideramos que el mercado de valores global se encuentra en terreno bajista, no debemos menospreciar a estas compañías.
De hecho, y a pesar de las barreras levantadas por el banco central chino y los riesgos que esto conlleva, son muchos los inversores residentes en EE. UU. y Europa que sienten la tentación de regresar a China con el fin de recibir las ganancias que tan escurridizas se les hacen en el resto del mundo en estos momentos. Y es que muchos de los grandes fondos de inversión previeron el fondo allá por octubre y noviembre, y durante más de 8 de las últimas 10 semanas vienen adquiriendo de forma reiterada valores en China. Ahora que agentes de menor tamaño comienzan a redirigir su capital hacia Shanghái y Hong Kong, podemos decir con certeza que la marea ha finalmente cambiado. El Nuevo Año Lunar está a la vuelta de la esquina y se avistan vientos aún más propicios en el horizonte cercano.
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Es demasiado pronto para afirmar si la actual recuperación de los valores chinos es el precursor que anuncia la recuperación generalizada de los activos de riesgo a nivel global, o incluso saber si este repunte se mantendrá más allá del nuevo año chino. Pero una cosa está clara, y es que ningún otro mercado de acciones está registrando un movimiento positivo tan notable como el que se está ahora produciendo en el sector tecnológico del Gigante Asiático. Con Libertex puedes operar con CFD de algunas de las firmas asiáticas con una mayor capitalización de mercado como Tencent, Baidu o Ali Baba. Los inversores más conservadores pueden también obtener beneficios con ETF centrados en China como el iShares China Large-Cap. Para obtener más información o crear una cuenta hoy mismo, visita www.libertex.com
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