Skip to main content

Advertencia de riesgo: Los CFD son instrumentos complejos y conllevan un alto riesgo de perder dinero rápidamente debido al apalancamiento. El 74,91 % de los inversores con cuentas minoristas pierde dinero al operar con CFD con este proveedor. Deberías considerar si entiendes cómo funcionan los CFD y si puedes permitirte correr el riesgo de perder tu dinero. Haz clic aquí para leer nuestra Advertencia de riesgo completa.

El 74,91 % de los inversores con cuentas minoristas pierde dinero al operar con CFD con este proveedor.

oil-gas-rise-winter

El petróleo y el gas vuelven a estar en el punto de mira ahora que la nieve golpea a Europa

Thu, 07/12/2023 - 14:19

Todos aquellos que dispongan de un vehículo propio o usen calefacción central en sus hogares recordarán sin duda el enorme repunte en los precios que estos recursos de primera necesidad registraron allá por 2022, época en la que la inflación sobre el resto de bienes y productos campaba igualmente a sus anchas. El crudo Brent alcanzó máximos de 122,70 $ por barril el verano pasado, mientras que la cotización del gas natural, activo claramente estacional también, se disparó enérgicamente, hasta el punto de que el precio de los futuros del Dutch TTF Natural Gas prácticamente se multiplicó por diez con respecto a su lectura en noviembre/diciembre de 2020 y alcanzó la escalofriante cifra de 290,05 € por MWh a finales de agosto del pasado año.

No obstante, después de este pico estos recursos energéticos experimentaron una fuerte tendencia descendente, que en el caso del gas natural se mantiene indudablemente en la actualidad. Por su parte, la trayectoria del petróleo ha variado ligeramente, si bien el destino ha sido claramente el mismo: el crudo Brent se desplomó de forma pronunciada en marzo de 2023 hasta un mínimo en el que se ha mantenido casi inalterado desde entonces. 

Pero lo que los inversores querrían realmente saber ahora que Europa se ha adentrado de pleno en la temporada de calefacción esta semana es, ¿qué dinámica podemos esperar apreciar en la cotización de estos combustibles hasta que acabe el inverno? ¿Conseguirá la estrategia de recortes a la producción emprendida por la OPEP+ elevar los precios, como esta espera? ¿Será suficiente el frío invierno que nos espera para propulsar el coste en destino del gas licuado de petróleo, incluso cuando Europa y Estados Unidos han tenido todo un año para prepararse para esta eventualidad? Descubramos cuáles son las respuestas a todos estos interrogantes y mucho más en nuestro artículo de hoy.

El gas se está calentando

Como ya hemos mencionado brevemente, el gas natural viene prácticamente protagonizando una caída libre tras el enorme crecimiento registrado en el verano de 2022, y es que este recurso energético fundamental se sitúa en el nivel más bajo de su rango promedio histórico, visto que el Dutch TTF se cotiza por 39,60 € el MWh y que el precio del Henry Hub es de 2,72 $ por MMBtu (con fecha de 6 de diciembre de 2023), lo que supone un descuento de casi un 80 % con respecto a los precios máximos vistos el año pasado. 

No obstante, no faltan motivos para que esto sea así. Europa aprendió la lección el invierno pasado y viene desde entonces aumentando de forma progresiva sus reservas hasta completar su capacidad, de ahí que los inventarios del Viejo Continente registren ahora máximos récord, mientras que la demanda de gas en Europa ha disminuido un 15 % - 20 % por debajo de sus niveles previos a la pandemia como resultado de una reducción de la demanda industrial. En consecuencia, la lógica nos haría creer que el pico de demanda de calefacción debería estar bajo control este invierno, ¿no es así?

Quizá no sea tan sencillo. Y es que, si bien es cierto que este valor energético disfruta de una salud mucho mejor de la que tuviese hace 12 meses, haríamos bien en evitar ser excesivamente optimistas. La oferta de gas seguirá siendo limitada en Europa hasta el primer trimestre de 2025, como mínimo, dado que se espera que la última ola de suministro llegue al mercado en 2025-2026. Si este invierno se demuestra tan duro como algunos prevén que será, puede que a muchos nos tome por sorpresa, especialmente si se da algún tipo de interrupción en el suministro, o si se produce un aumento de la demanda industrial en Asia y más allá. Después de todo, la inflación parece estar estabilizándose, y es probable que el PMI vuelva a adentrarse en territorio de crecimiento, incluso en Europa.

De ser así, las probabilidades de que el precio del gas se eleve aumentarán también de forma exponencial, y es aún más posible que el Henry Hub registre ganancias si tenemos en cuenta la fuerza relativa de la economía estadounidense y de su mercado laboral, considerando también el hecho de que la Reserva Federal está distanciándose de su agresiva política monetaria, y que la inflación parece haberse prácticamente estabilizado.

No obstante la agenda verde, el petróleo sigue en el ring

El crudo es otro producto energético clave que se ha desplomado desde vertiginosas alturas hasta niveles más razonables en el último año. Y, a pesar de los problemas de suministro consecuencia de la inestabilidad geopolítica regional (en esta ocasión tanto en Europa como en Oriente Medio), el Brent ha de alguna manera logrado esquivar el cénit de más de 120 $ por barril que anteriormente conquistase. Lo cierto es que existen múltiples factores de presión que precipitan al crudo al abismo y, por lo que parece, pocos que le sirvan de arnés.

En primer lugar, hemos de mencionar la arrolladora tendencia mundial que avanza hacia fuentes de energía más respetuosas con el medio ambiente, donde los vehículos eléctricos lideran la carrera. Después está el sumamente poderoso factor de la OPEP+ y los países productores de petróleo a esta asociados. Este cartel, liderado por Rusia y Arabia Saudita, ha ya acordado mantener los recortes a la producción.

El pasado 5 de noviembre tanto el Reino de Arabia Saudita como la Federación de Rusia convinieron en prolongar la reducción voluntaria de 1 millón y 300.000 barriles por día, respectivamente, hasta finales del presente año. De hecho, y según Reuters, se espera que los dos mayores agentes de la OPEP+ se reúnan más adelante este mismo mes para resolver la "extensión, intensificación o aumento" de sus recortes diarios. Se espera que la reacción en cadena de este fenómimo, unida a la creciente demanda procedente de un renovado sector industrial en China, impulse los precios en el último trimestre de 2023.

La Administración de Información Energética de Estados Unidos estima que el Brent alcanzará los 93 $ para finales de 2023, mientras que el Light Sweet y el WTI le seguirían de cerca. En caso de que el oro negro se eleve finalmente hasta este nivel cuando el presente año llegue a su fin, la probabilidad de que las ganancias continúen en 2024 no pueden sino aumentar. 

Opera con CFD de energía y mucho más con Libertex

Libertex es un bróker que pone a tu disposición CFD de una amplia variedad de activos que abarcan desde acciones, índices y ETF hasta metales, recursos energéticos, productos agrícolas y, por supuesto, productos energéticos como el gas natural y el petróleo. Libertex te permite abrir tanto posiciones largas como cortas sobre grandes activos subyacentes del sector del crudo y del gas como son WTI, Light Sweet, Brent y Gas natural Henry Hub.